Hace unos días, el Ministro de Justicia, Teodoro Ribera, dijo que cuando el Gobierno tenga que escoger entre ternas o quinas para el ascenso de jueces, va a sopesar sus antecedentes. Esto puede parecer obvio, pero por el contexto que vivimos actualmente, se entendió como que el Gobierno elegirá ascender a los jueces de acuerdo a si actuaron o no con dureza ante los detenidos en las manifestaciones.

El presidente de la Corte Suprema, Milton Juica, expresó que esto constituye una amenaza para el Poder Judicial, el que a través de un acta expresó que el Ministro Ribera busca interferir en las decisiones del Poder Judicial.

Con esto queda de manifiesto la desconfianza del Poder Ejecutivo al Judicial y viceversa. Lamentablemente, el ciudadano común también desconfía después de acumular los abusos de los directivos de La Polar, de los sostenedores que lucraron con la educación, etc.

Los jueces también caerán en esta atmósfera de desconfianza, pues creerán que se les evaluará de acuerdo a criterios políticos y no profesionales.

Escucha el comentario de Nibaldo Mosciatti:

http://youtu.be/qHZQ4WseKgc