El ministro de Justicia Teodoro Ribera fue abordado e increpado durante una visita realizada al Gobernador de Bío-Bío, por familiares de los soldados muertos en Antuco.

Tras culminar un punto de prensa, el Ministro Ribera fue abordado por Angélica Monares y otros familiares, quienes le expusieron su frustración y molestia tras conocer el fallo de la Corte Suprema, que otorgó la libertad al ex Mayor Patricio Cereceda, el único imputado que pagaba con cárcel.

Los familiares le señalaron que están en medio de la pugna que existe entre el poder judicial y el Ministerio de Justicia, añadiendo que hasta ahora junto a los soldados han muerto familiares, exigiendo respuesta al doble estándar que dicen que hay cuando se le da 5 años a una persona y al tiempo se le libera, y le preguntaron ¿qué hubiera pasado si entre los muertos hubiera estado su hijo o un hijo del Ex General Cheyre?,

Ademés le preguntaron su opinión sobre el recurso que se presentará en el Tribunal constitucional, a lo que el Ministro respondió que no puede emitir opiniones sobre ese tema puntual. Añadió que la Corte Suprema sólo ratificó una decisión de la Corte de Apelaciones, descartando que la medida se relacione con ninguna pugna, y argumentó que la opinión del Ministerio se reflejó en la negativa del Seremi Metropolitano.

Tras el diálogo, una joven interrumpió la conversación gritando y emitiendo algunos epítetos, intentando ser controlada por los otros familiares y personal de seguridad.

Tras el incidente, el Ministro se retiró del lugar.