Los 15 países miembros de la Commonwealth, cuyo jefe de Estado es la Reina, están de acuerdo para cambiar las reglas de sucesión al trono de Inglaterra, con miras a poner fin a la primacía masculina para acceder a la corona, anunció el viernes el Primer ministro británico.

Estos cambios harán posible también que el heredero real pueda casarse con una católica, sin renunciar a la corona.