El ministro japonés de Finanzas, Jun Azumi, prometió el jueves que su país tomará “las medidas necesarias” para ayudar a Europa a salir de la crisis de la deuda, tras el acuerdo europeo obtenido en la cumbre de Bruselas.

El interés de Japón es que haya “una Europa estable”, dijo el ministro ante el Parlamento.

Desde principios de año, Japón invirtió 2.680 millones de euros, es decir 20% del monto total de los empréstitos emitidos por el Fondo Europeo de estabilidad Financiera (FEEF), el órgano creado para socorrer a los países excesivamente endeudados de la zona euro.

Antes de la cumbre de bruselas, las autoridades japonesas se declararon dispuestas a invertir más a condición que los europeos se pusieran de acuerdo sobre un plan capaz de devolver la calma a los mercados.

El jefe del FESF, Klaus Regling, viajará Tokio el fin de semana, tras una visita a Pekín.