Más de un treinta por ciento de los alumnos de séptimo básico de colegios municipales y subvencionados del área norte de Santiago consume marihuana y tabaco, según un estudio de la Universidad de Chile.

El tema preocupa al realizador del estudio, Jorge Rodríguez, de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, porque hasta ahora todos los programas de prevención y rehabilitación son para la enseñanza media.

Situación que según la secretaria ejecutiva del Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (Senda), Francisca Lorenzano, es aún más grave si se considera que se invierte poco en salud mental que influye fuertemente en la adicción.

La misma situación se repite en octavo con los cigarros y el alcohol, realidad que disminuye en sexto básico con un 28 por ciento de consumo de bebidas etílicas y uno de cada cuatro alumnos adictos al tabaco.