Principio de oportunidad, que es una facultad de los fiscales del Ministerio Público de no perseguir penalmente a una persona, se aplicó al verificar que el motivo de la detención de un dirigente secundario -quien fue aprehendido cerca de la Universidad de La Frontera la noche del jueves- no constituye delito.

Se trata de Mario Mermoud Quintana, alumno del Liceo Municipal Pablo Neruda de Temuco y vocero de la Asamblea de Estudiantes Secundarios Popular, quien vistiendo su uniforme fue detenido por Carabineros tras las manifestaciones que se registraron en Avenida Francisco Salazar, frente al campus Andrés Bello de la UFRO.

Al ser presentado a la audiencia de Control de la Detención, la jueza Marcia Castillo decretó ilegal la detención, tras lo cual el fiscal Cristian Crisosto aplicó principio de oportunidad.

Por ello, el estudiante quedó inmediatamente en libertad y luego comentó a La Radio las circunstancias en que fue detenido.

La jueza Castillo, igual que en la jornada anterior, amparó su decisión de declarar ilegal la detención en el hecho que la Fiscalía pudo evitar que el menor permaneciera en los calabozos de una unidad policial, dejándolo a la espera de una citación.

Lo anterior, especialmente, si se considera que para este tipo de hechos que corresponden a desórdenes públicos, el adolescente arriesga una sanción en horas de trabajo al servicio de la comunidad, por lo que la detención parece como desproporcionada.