El cineasta brasileño Fernando Meirelles convenció a sus amigos famosos de participar en una campaña que pide a los senadores de su país que veten una polémica reforma de la ley de bosques, considerada un desastre por los ambientalistas, informó la prensa local.

“No podemos quedarnos quietos ante un proyecto como este, las selvas son la mayor riqueza de nuestro país. Invito a todos los brasileños a participar en nuestra campaña”, pide la superfamosa modelo Gisele Bundchen en uno de los vídeos que ya pueden verse en internet.

El director de “Cidade de Deus” (Ciudad de Dios, 2002), que ahora está lanzando su nueva película “360″ con Rachel Weisz, Jude Law y Anthony Hopkins, no recurrió a ninguna superproducción para la campaña, al contrario, convenció a sus amigos famosos para que grabasen mensajes con sus cámaras web, o incluso celulares, desde sus casas.

“En vez de alquilar un estudio, con luces y maquillador, tuvimos la idea de que cada uno grabara con su própia cámara y sin guión (…) cada uno elaboró el mensaje que quiso”, explicó el cineasta, citado por los sitios UOL y Estadao-ESPN.

“Señores senadores, un error tendrá consecuencias desastrosas para muchas generaciones”, advierte la actriz Alice Braga.

“Yo soy nieto de granjero, estoy preocupado por los cambios que están proponiendo”, les dice el también actor Rodrigo Santoro a los senadores favorables al poderoso sector agropecuario.

Los vídeos serán lanzados el viernes como parte de una campaña que cuenta con la adhesión de las principales organizaciones ambientalistas y sociales de Brasil, donde se halla el mayor bosque tropical del planeta.

La campaña puede verse en sitio web www.florestafazadiferenca.org.br, y cualquier brasileño podrá mandar un vídeo personal para sumarse a la iniciativa contra la reforma legal.

Apoyada por el poderoso sector agropecuario del país, la Cámara de Diputados de Brasil aprobó en mayo una reforma que flexibiliza la ley que protege los gigantescos bosques del avance agrícola, conocida como Código Forestal.

Los ambientalistas denuncian que grandes áreas de bosques pueden quedar desprotegidas por esa legislación, que ahora está en manos del Senado.