Familiares de víctimas de atentados expresaron este jueves su decepción tras el anuncio del cese definitivo de la lucha armada por la banda independentista vasca ETA, y exigieron su “disolución”.

“Hoy estamos decepcionados porque no es el último paso, sino que queda acabar definitivamente con la banda terrorista ETA”, dijo por teléfono a la AFP María del Mar Blanco, hermana del concejal vasco del Partido Popular Miguel Ángel Blanco, asesinado por la organización armada en 1997.

“Ni hablan de la disolución de la banda terrorista ni de la entrega de armas. Lo que nos anuncian es que nos perdonan la vida, pero a cambio de algo”, añadió María del Mar Blanco, actualmente diputada del PP (conservador) en el parlamento autonómico vasco.

“Seguiremos trabajando hasta que consigamos su disolución definitiva. Sin ningún tipo de negociación, de contrapartida, y desde luego exigiéndoles el reconocimiento del daño causado”, añadió esta mujer, que tenía 22 años cuando su hermano fue asesinado el 12 de julio de 1997.

Miguel Ángel Blanco, concejal del PP en Ermua, un pueblo de la provincia de Vizcaya, fue asesinado pocos días después de su secuestro por ETA. Su asesinato provocó en toda España una ola de manifestaciones contra el terrorismo sin precedentes.

“Se reconoce a sus víctimas (de ETA) pero no reconocen a las casi mil víctimas inocentes que han asesinado por la imposición de un proyecto político totalitario y mafioso”, añadió su hermana.

El mismo escepticismo y las mismas exigencias formuló la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Ángeles Pedraza.

“Es el comunicado que esperamos pero no el que queríamos”, declaró a Radio Nacional de España.

“ETA dice que hay un cese definitivo pero no dice que hay una derrota. Entonces, para nosotras las víctimas, no nos vale este comunicado”, añadió.

“Por supuesto que nos alegra que hay un cese definitivo de la violencia pero hay más. Tiene que haber la entrega de las armas, la disolución de la banda y que pidan perdón a las víctimas por los daños causados, y por supuesto que se pongan a la disposición de la justicia”, argumentó.

“Si no es así no nos vale nada”, apostilló.

“Sinceramente no creo nada. No creo en ETA, no creemos en asesinos. Esto es otro comunicado más, un pasito más, no los creo, lo siento”, añadió.

La organización armada independentista vasca ETA anunció el jueves “el cese definitivo” de la violencia, un hito histórico tras más de 40 años de atentados por la independencia del País Vasco, que fue calificado de “victoria de la democracia” por el gobierno español.

ETA nunca ha mencionado hasta ahora, y tampoco lo hizo en el comunicado del jueves, una posible entrega de armas o su disolución.

Considerada organización terrorista por la Unión Europea y por Estados Unidos, ETA es responsable de la muerte de 829 personas en más de 40 años de atentados por la independencia del País Vasco.