Un anticuerpo humano ha mostrado su eficacia en monos de laboratorio contra un mortal virus originario de los murciélagos que ha matado a varias personas y a docenas de caballos desde que fue descubierto en Australia en 1994, aseguraron científicos de Estados Unidos.

El último brote de virus Hendra mató a más de 20 caballos en los estados australianos de Nueva Gales del Sur y Queensland desde junio, pero no ha afectado a ningún humano. Sin embargo, cuatro de las siete personas que alguna vez contrajeron la enfermedad murieron.

La investigación, publicada en la revista especializada Journal Science Translational Medicine, fue realizada en un laboratorio con grandes medidas de seguridad en Montana, donde 14 monos verdes fueron infectados con el virus.

Doce de los simios fueron tratados con un anticuerpo denominado m102.4 y sobrevivieron, mientras que sus pares que no recibieron la dosis murieron.

Los experimentos realizados con anterioridad en animales más pequeños también han mostrado la eficacia de los anticuerpos contra el virus Hendra.

Luego de que finalizaran las investigaciones estadounidenses en 2010, el anticuerpo fue inyectado a una mujer y a su hija de doce años en Australia, como una medida de protección adicional contra el Hendra.

Aunque las dos pacientes sobrevivieron sin efectos secundarios, los científicos afirman que necesitan realizar más pruebas antes de que el anticuerpo pueda ser utilizado como un medicamento de uso generalizado.

“Creo que este es un tratamiento muy prometedor, especialmente cuando uno considera que era efectivo aún tres días después de su aplicación”, afirmó el director del estudio Thomas Geisbert, perteneciente a la rama médica de la Universidad de Texas en Galveston.

Se cree que el virus Hendra, que mata a cerca del 60% de los infectados, se transmite desde los caballos a través de los frutos a medio comer o el agua y la comida contaminada por murciélagos.

Los caballos pueden contagiar a los humanos, aunque no han sido documentados casos de transmisión entre seres humanos.