Continúa la investigación en contra del sacerdote Miguel Ángel Soto Macías, párroco perteneciente a la congregación Misioneros de la Preciosa Sangre, de Purranque, acusado de presunto abuso sexual.
Vale recodar que Soto Macías está siendo investigado desde la primera semana de agosto de este año, tras una denuncia formulada por familiares de un joven de 24 años que tendría limitaciones mentales, pero que habría sindicado al religioso de Purranque como el autor de abusos sexuales al interior de un automóvil de su propiedad.
Durante la investigación, realizada por la Brigada de Delitos Sexuales de la PDI de Osorno, se pudo establecer un nuevo caso de presunto abuso sexual, ésta vez de un joven, también mayor de edad, pero en situación de calle, y quien también sindicó al sacerdote como el autor de los hechos.
Así lo manifestó la fiscal jefe de Río Negro, María Angélica De Miguel.
La fiscal del caso agregó que durante estos días se están tomando peritajes psicológicos a las victimas, además de declaraciones de testigos, lo que determinará finalmente si es que hay o no antecedentes suficientes para formalizarlo.
Al respecto se refirió también el jefe de la brigada de delitos sexuales de la PDI de Osorno, Luis Lillo, quien detalló parte de la investigación realizada.
Por su parte, el superior de la congregación Misioneros de la Preciosa Sangre, padre Luis Briones Pincheira, reveló que ellos ya finalizaron una investigación previa e interna, cuyos resultados –que se mantienen en reserva- fueron entregados a la Policía de Investigaciones.
Cabe destacar además que desde la Congregación Religiosa informaron que el sacerdote Miguel Ángel Soto Macías se encuentra alejado de sus funciones pastorales y que asegura inocencia.
