Suena como uno de esos mitos urbanos que rondan los aparatos tecnológicos, sin embargo y por más extraño que parezca, un grupo de investigadores de Singapur descubrieron que un disco duro puede contener hasta 6 veces más datos agregándoles un simple ingrediente: sal común de mesa.

El hallazgo del doctor Joel Yang fue publicado este viernes por la Agencia para la Ciencia, Tecnología e Investigación de Singapur, basado en un estudio que realizó mientras se desempeñaba en el MIT de Estados Unidos.

Según recoge The Register, la idea es simple: la información en los discos duros se almacena ordenando partículas magnéticas muy pequeñas, bajo un procedimiento llamado “medios con patrones de bits” (BPM).

Entre más partículas puedan ordenarse en un disco, más información contendrá. Sin embargo, esta capacidad está limitada por el tamaño de los granos que es posible manejar, actualmente de entre 7 a 8 nanómetros (nm).

El doctor Yang sin embargo, se percató de que al agregar cloruro de sodio -sal de mesa común- se podía crear partículas altamente definidas de hasta 4.5nm, sin la necesidad de realizar grandes modificaciones a los equipos usados en la fabricación, por lo que no debería redundar en mayores costos.

Institute of Materials Research and Engineering (IMRE)

Institute of Materials Research and Engineering (IMRE)

“Los bits pueden agruparse de forma mucho más concentrada con sólo reducir el número de pasos”, afirmó Yang, estableciendo que un disco actual de 500 GB podría contener hasta 3 TB de datos mediante este procedimiento.

Sin embargo no se te ocurra echarle el salero encima a tu computador: recuerda que este es un procedimiento que debe realizarse en la fabricación del disco, por lo que deberemos esperar todavía un poco para beneficiarnos de este importante hallazgo.