La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, defendió el lunes a su ministro de Deportes, Orlando Silva, ante denuncias de que habría desviado dinero público publicadas el fin de semana en la prensa.

“Nosotros presumimos la inocencia”, dijo Rousseff cuestionada sobre el tema por la prensa brasileña en Pretoria (Sudáfrica), donde participará el martes de una cumbre con el presidente de Sudáfrica y el primer ministro de India.

La presidenta advirtió también que el Ejecutivo “sigue atentamente todas esas denuncias, los esclarecimientos y las investigaciones”.

Rousseff destacó que el propio ministro “pidió una investigación de la policía federal y la fiscalía sobre las acusacines que le hacen, que él tachó de injusticia”.

La mandataria quiso dejar fuera de cualquier duda eventuales irregularidades en la organización de la Copa del Mundo 2014 y aseguró que los contratos y las ONGs implicadas en el evento son ampliamente investigados.

Brasil acogerá en 2014 la Copa del Mundo y en 2016 las Olimpíadas, dos eventos para los que el ministerio de Deportes es clave.

La revista Veja divulgó el fin de semana un artículo en el que implicó al ministro y al Partido Comunista de Brasil (PCdoB), al cual pertenece Silva, en millonarios desvíos de dinero público a través de ONGs y de un programa para promover el deporte entre jóvenes pobres.

La fuente de Veja es un policía del mismo partido, que fue detenido el año pasado acusado de desvíos de esa cartera.

Orlando Silva calificó las denuncias de “calumnias” y pidió una investigación.

Rousseff, que asumió en enero, perdió a cuatro ministros debido a denuncias de corrupción y desvíos de dinero público publicadas en la prensa. En septiembre dimitió el ministro de Turismo, en agosto el de Agricultura, y antes habían renunciado el ministro de Transportes y el jefe del gobierno.