El entrenador neozelandés de Australia, Robbie Deans, dijo este domingo, tras caer 20-6 en las semifinales, que cree “difícil” que Francia pueda parar a los All Blacks dentro de una semana en la final del Mundial de rugby, donde los anfitriones serán los grandes favoritos.

“Los All Blacks han demostrado esta noche que tienen de largo argumentos para ganar. Tienen ganas, son un grupo con experiencia, cuyo núcleo duro disputa su tercer Mundial. Tienen hambre de victorias y mucho apoyo, así que va a ser difícil que les paren”, explicó Deans.

“Durante toda la noche nos han impedido que marcáramos el ritmo. Teníamos la sensación de que el partido no estaba decidido al descanso, pero en la segunda parte pudimos haberlo hecho mejor”, apuntó.

Para Deans, el ritmo del equipo local y su acierto en el juego por alto fue determinante para evitar cualquier posibilidad de remontada.

El DT de Australia registró su duodécima derrota en quince partidos al frente de los Wallabies contra el entrenador Graham Henry, una de sus ‘bestias negras’, pero que tras la Copa del Mundo abandonará su puesto.

“Este partido era por encima de todo de los Wallabies contra los All Blacks, pero Graham ha hecho un trabajo magnífico y tiene un balance impecable. Dudo que sea la última vez que nos veamos, aunque sea de una manera diferente. Buena suerte a Nueva Zelanda para la final”, apuntó.

En su equipo, varios jugadores destacaron que este equipo neozelandés, en un Mundial en su casa, es muy difícil de derrotar.

“No hemos estado bien en varios momentos del partido para hacer bajar su presión. Hemos fallado ocasiones para marcar en la segunda parte. Es realmente decepcionante terminar así. Ellos han estado bien en el juego por algo, ya sabíamos que iba a ser así”, comentó el segunda línea y capitán, James Horwill.

“Felicidades a los All Blacks, nos han dominado y han merecido su victoria. Es un gran equipo. Han estado muy eficaces en todo lo que han hecho. Lo hemos intentado, pero han sido ellos los que han marcado los puntos en la segunda parte”, señaló.

Por su parte, el apertura Quade Cooper, que fue víctima de los sarcasmos y ataques verbales de parte de la hinchada, se mostró resignado también por la mala imagen que parece tener entre los aficionados del país en el que nació y creció, antes de emigrar con 15 años a Australia, a cuya selección defiende.

“Ha sido así desde que bajé del avión y lo será hasta que esté en el avión de vuelta. Simplemente tenía que centrarme en hacerlo lo mejor posible para mi equipo y creo que lo he hecho”, señaló.