El entrenador de Nueva Zelanda, Graham Henry, pidió cautela a sus jugadores este domingo, después de su brillante victoria en la semifinal ante Australia (20-6), recordando que el trabajo no está terminado y que aún hay que vencer a Francia en la final del día 23.

“Hemos estado muy bien, los chicos han estado heroicos. Estoy muy orgulloso de ellos, pero no hemos terminado el trabajo, tenemos que comprender eso. Tenemos que volver a poner los pies en el suelo en los próximos días para preparar el próximo partido”, declaró Henry en rueda de prensa.

“Los chicos han tenido un carácter soberbio. Todos los que han estado sobre el césped se han entregado al 100%. La defensa ha sido excepcional”, destacó, pidiendo a sus pupilos que mantengan esa actitud para la final y que dentro de una semana “lo hagan de nuevo”.

Henry recordó que los All Blacks y los Bleus son viejos conocidos y que en 2007, cuando él ya estaba al frente del equipo, Francia eliminó a Nueva Zelanda en el Mundial, en un partido en Cardiff (20-18).

“Será un gran partido de rugby. Tenemos un gran pasado con Francia en el Mundial y les respetamos”, señaló el entrenador sobre esa gran final.