En todo Estado soberano, libre y democrático, cohabitan 3 poderes como lo son el Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Sin embargo diversos pensadores han postulado la existencia de otros, entre los cuales está la prensa y que se le ha denominado “el cuarto poder”.

Este rótulo surgió en la época de la Revolución Francesa por el siglo XVIII cuando el escritor y político británico Edmund Burke apuntó a la galería donde estaba instalada la prensa durante una reunión de la Cámara de los Comunes, diciendo: “Ahí está el Cuarto Poder, y verán que sus miembros serán más importantes que ustedes y se unirán a la cruzada por las libertades”.

Sin embargo, con el correr de los años la prensa ha debido asumir un nuevo rol en la sociedad más como un contrapoder, mientras que otros han asumido ese lugar dejado por la prensa, como es el caso de los grupos económicos que han entrado de la mano del sistema capitalista imperante.

Otro importante teórico de las ciencias sociales como Noam Chomsky ha postulado que los medios de comunicación deben cumplir dos roles fundamentales dentro de una estructura de poder democrática. En primer lugar entregar información completa, limpia e imparcial.

Pero además, señala que la prensa debe constituirse en vigilantes para evitar excesos de quienes detentan el poder en contra de las libertades básicas de los individuos, especialmente cuando quedan al descubierto truculentas prácticas de entidades como La Polar, sólo como un ejemplo.

En ese sentido los medios de comunicación deben como primera premisa estar al servicio de los ciudadanos, más allá de intereses comerciales o políticos. Es un rol social que se deriva en los principios básicos de informar, educar y entretener, en un orden que a mi juicio debiera ser respetado.

Hace unos días causó escozor entre el medio periodístico en general, la detención de algunos profesionales de la prensa, durante la movilización convocada por los estudiantes en Santiago el pasado 6 de octubre.

Si bien quisiera creer que sólo se trató de un hecho aislado, no deja de preocupar el hecho tomando en cuenta que estas las detenciones, o “retenciones” como eufemísticamente Carabineros las denominó, corresponden a regímenes donde no hay democracia.

Es un mal síntoma en la sociedad que los medios de comunicación tengan impedimentos en su rol de informar, pues queda en entredicho la democracia más allá de las líneas editoriales que éstos tengan y la poca diversidad que hay entre la prensa.

Según Chomsky lo ideal en una sociedad democrática es que exista un orden “donde seremos libres de pensar como nosotros queramos y leer, escuchar o ver, cualquier cosa que deseemos”.

Claramente la prensa debe cumplir ese rol como contrapoder del Estado para fortalecer la democracia, y en ese sentido, las instituciones públicas deben facilitar ese trabajo de los medios de comunicación en pro de la salud cívica de nuestro país.