La prensa iraní rechazó unanimamente este jueves las acusaciones estadounidenses implicando a Teherán en un complot contra el embajador saudí en Washington, considerándolas poco creíbles y sólo destinadas a perjudicar a Irán.

En su mayoría, los periódicos restaron importancia a la información, publicándola en páginas interiores.

Sin sorpresa, la prensa conservadora o ultraconservadora allegada al poder retomó los argumentos de los dirigentes iraníes que rechazaron en bloque las acusaciones de Washington.

El cotidiano Javan, allegado a los Guardias de la Revolución, señalados por Washington en este caso, destaca “la ausencia de pruebas” y ridiculiza “el fracaso del complot estadounidense (contra Irán) organizado con un ex ladrón”, en referencia al expediente judicial del estadounidense-iraní presentado como eje del proyecto.

El cotidiano conservador moderado Emruz estima que las acusaciones norteamericanas “sólo constituyen un nuevo esfuerzo para reactivar el antiguo proyecto de crear divisiones entre los dos principales países islámicos” Irán y Arabia Saudí.

La prensa reformista de oposición no se queda atrás en la crítica y el sarcasmo. El escenario del presunto complot desafía el “de los juegos vídeos más complejos” y “constituye un insulto a la inteligencia de los iraníes”, ironiza Shargh, uno de los principales cotidianos reformistas.

Otro periódico reformista, Etemad, estima que Washington “trata de implicar a Iran en un nuevo caso para tratar de silenciar sus críticas a la política estadounidense”.

“Estados Unidos y Europa quieren igualmente servirse de esas nuevas acusaciones para reactivar el tema nuclear de Irán ante el Consejo de seguridad de la ONU”, analiza el diario.