Miles de personas se reunieron este domingo en el centro de Madrid para disfrutar de la marcha festiva que cerró el festival “Vivamérica”, tras una semana de exposiciones, conferencias y actos culturales con Latinoamérica como referente.
El cantante y trombonista estadounidense, de origen puertorriqueño, Willie Colón cerró con un concierto en la céntrica Plaza de Cibeles madrileña, una marcha que había partido desde la estación de Atocha a unos cientos de metros del lugar del concierto final a primera hora de la tarde.
La marcha la abrió una carroza desde la que el Instituto Mexicano del Sonido hizo bailar a los espectadores con su mezcla de canciones tradicionales mexicanas con sonido electrónico, tras la cual desfilaron distintos grupos de los diferentes países latinoamericanos ataviados con coloridos atavíos.
Vestidas con unas vistosas plumas blancas, unas bailarinas exhibieron bailes de la isla de Pascua, mientras jóvenes paraguayos realizaban el baile de la botella, entre otras actuaciones musicales.
Combinando el blanco y el rojo en sus ropas, una agrupación boliviana también deleitó al público con sus evoluciones, al igual que el baile que realizó un grupo peruano al son de ritmos andinos, uno de los más de 20 colectivos que participaron en el desfile.
La fiesta de música y color tuvo su colofón con el concierto de willie Colón, el rey de la salsa, que logró congregar en el centro de Madrid a miles de personas, a las que deleitó desde un escenario colocado ante la fachada del ayuntamiento de la capital española.
