El régimen sirio advirtió el domingo que tomará medidas en contra de todos los países que reconozcan al Consejo Nacional Sirio (CNS), órgano que agrupa a la mayoría de los movimientos opuestos al presidente Bashar al Asad.

“Vamos a tomar medidas importantes en contra de todo país que reconozca a este ilegítimo Consejo”, afirmó el ministro de Relaciones Exteriores, Walid Mualem, en una conferencia de prensa.

Creado a finales de septiembre en Estambul, el CNS agrupa por primera vez a todas las tendencias políticas, e integra en sus filas los Comités Locales de Coordinación (LCC) que organiza las manifestaciones en el terreno, los liberales, los Hermanos Musulmanes, grupo prohibido desde hace tiempo en Siria, así como a partidos kurdos y asirios.

Por su parte, el presidente Asad, sacudido por una oleada de protesta popular desde mediados de marzo, anunció que su gobierno prepara reformas políticas a la vez que prometió terminar con las “bandas armadas” responsables a su juicio de la violencia.

Asad también acusó a las potencias occidentales “de interesarse poco en las reformas y en cambio querer hacerle pagar a Siria el precio de su posición contra los planes urdidos en el exterior”.