Como un importante apoyo para la producción agrícola de la Región del Maule, calificó el Coordinador de la Macro Zona Centro de la Comisión Nacional de Riego (CNR), Mauricio Melo, la entrega de bonificaciones por 879 millones de pesos, provenientes del resultado de los concursos 5-2011 y 7-2011 de la Ley de Fomento a la Inversión Privada en Obras de Riego y Drenaje, efectuada el viernes 7 de octubre en Curicó.

Estos recursos, agregó Mauricio Melo, corresponden a 48 proyectos de las comunas de Cauquenes, Curepto, Curicó, Linares, Longaví, Maule, Molina, Parral, Pelarco, Retiro, Río Claro, Romeral, Sagrada Familia, San Clemente, San Javier, Teno, Villa Alegre, Yerbas Buenas, y se traducen en 1.331 hectáreas tecnificadas.

El Jefe Nacional de Fomento de la CNR, Manuel Jara, explicó que los agricultores, a través de la tecnificación del riego, aprovechan de mejor forma el agua que tienen. “Con este sistema –apuntó– ellos son capaces prácticamente de duplicar la superficie que hoy día tienen bajo riego. Además, les permite entregar nutrientes y otro tipo de elementos que les posibilitan, además, cambiar el tipo de cultivo, optando por aquéllos que sean mucho más rentables para su desarrollo”.

Tema no menor si, tal como lo advirtió Manuel Jara, en la charla con que se dio inicio a esta ceremonia, Chile está entrando en un período de escasez hídrica muy fuerte, que ya está instalado desde la Quinta Región al norte. “Pero que, con el aumento tanto de las temperaturas que se pronostican como del consumo del agua, seguramente se va a ir incrementando y se va a extender hacia al sur. Desde ese punto de vista, todas aquellas iniciativas que tengan que ver con una mayor eficiencia en el uso del agua son beneficiosas y, obviamente, el Gobierno está interesado en que ellas se desarrollen”, agregó.

Respecto de esto último, Mauricio Melo recordó que el Gobierno ha estructurado las políticas de desarrollo de infraestructura de riego en tres líneas estratégicas. La primera, a largo plazo, corresponde al Plan Nacional de Embalses, el cual considera que, durante esta gestión, comiencen a operar dos obras de acumulación, Ancoa en la Región del Maule y El Bato en Coquimbo. La segunda línea, a mediano plazo, es el fortalecimiento de las Organizaciones de Usuarios de Agua, ya que son éstas las que administrarán las obras. Y por último, a corto plazo, una mayor tecnificación, mediante la
Ley de Fomento, que ayude a mitigar el problema del déficit. “Estamos trabajando fuerte con las organizaciones para regularizar los derechos de aprovechamiento de agua. En esta Región, estamos con cuatro estudios de prefactibilidad para definir emplazamientos de embalses”, ejemplificó.

La Secretaria Regional Ministerial de Agricultura, Anita Prizant, agregó que estos estudios de prefactibilidad corresponden al Teno en Maule Norte, al Huedque en Cauquenes, al Montecillo en Linares, y a las Guardias en Longaví. “Tenemos absolutamente claro que son procesos largos, que no los vamos a terminar en este período, pero con esa misma claridad sabemos que es importante acumular el agua que tenemos, considerando el fuerte impacto generado por el cambio climático”.