¿Qué tal un crucero para rastrear botellas, tapones y juguetes de plástico que flotan en el mar? Una asociación de lucha contra la contaminación marina ofrece “aventuras ecologistas” para seguir la estela de los residuos dejados por el tsunami en Japón.

A partir del 1 de mayo de 2012, el Sea Dragon, un yate de 22 metros de eslora, navegará durante dos meses en el norte del Océano Pacífico en medio de los residuos dejados por el tsunami que asoló Japón en marzo de 2011, anunciaron los organizadores el miércoles en un comunicado.

El crucero es organizado por The 5 Gyres Institute y el Algalita Marine Research Institute, dos organizaciones con sede en California que luchan contra la contaminación marina por plástico.

“Vamos a seguir las mismas corrientes que transportan los encendedores desechables, las tapas de botellas, los juguetes y todo tipo de contaminación de plástico generada por el tsunami”, dijo el líder de la expedición Marcus Eriksen.

Hay nueve plazas disponibles en el barco, que hará el viaje en dos etapas. La primera (a 13.500 dólares por persona) saldrá de las Islas Marshall en una zona del Pacífico Norte llamado el “gran basural del Pacífico”. La segunda (de 15.500 dólares) irá desde Japón a Hawai y cruzará la zona conocida como “campo de basura del tsunami japonés”.

Los participantes ayudarán en la navegación y en la búsqueda de residuos.

“Es interesante comprender la rapidez a la cual se mueven los residuos de plástico, la tasa de descomposición, el impacto sobre la flora y fauna marina y si transportan o no consigo especies invasivas”, dicen los organizadores.

En junio, el grupo ecologista francés Robin Hood afirmó que el tsunami que siguió al terremoto de magnitud 9 en Japón generó un total de residuos -entre automóviles, aviones, tanques de productos químicos, y demás- estimado en 25 millones de toneladas, que estarán a la deriva durante diez años y provocarán enormes daños al ambiente marino.