Encima erradicados desde las cercanía de la Termoeléctrica Bocamina 2, que exigen la nulidad del contrato, protestaron en las afueras del Juzgado de Letras de Coronel en cuyo interior el gerente de Endesa respondió al Tribunal sobre los documentos suscritos con los demandantes.

El caso corresponde a las primeras 20 familias erradicadas por las obras de Bocamina 2 en Coronel, que el año pasado ganaron el juicio de nulidad del contrato firmado con Endesa, que incluía el pago de 360 millones de pesos.

Según David Vargas, abogado de los vecinos, de ser nuevamente favorable, el fallo les permitiría retornar al lugar de origen y detendría las obras de la termoeléctrica.

La absolución de posiciones se cumplió en el primer Juzgado de Letras de Coronel, en cuyo exterior protestaron 50 personas. Algunas parte de este caso, pero también otros erradicados, quienes en abril de este año solicitaron una medida prejudicial para que Endesa entregue una copia de lo firmado, porque hay quienes ni siquiera tienen copia de las escrituras de las viviendas que recibieron y quieren saber qué fue exactamente lo convenido.

Endesa respondió las preguntas el gerente Eduardo Ruiz, visiblemente molesto con la manifestación, la que eludió encerrado en el Tribunal.