La organización Human Rights Watch (HRW) pidió a los dirigentes del Consejo Nacional de Transición (CNT) que ponga fin a los arrestos arbitrarios y a los malos tratamientos aplicados a los prisioneros en Libia.

Esta organización de defensa de los derechos humanos con sede en Nueva York visitó 20 instalaciones penitenciarias en Trípoli e interrogó a 53 prisioneros.

“Los detenidos dieron cuenta de malos tratos a seis prisionero, indicando en particular que fueron apaleados y que recibieron choques eléctricos. Algunos de ellos mostraron cicatrices para apoyar sus acusaciones. Ninguno de ellos ha sido presentado a un juez”, denunció HRW en un comunicado.

“Con la ayuda de sus apoyos internacionales, el CNT debe instalar sin tardar un sistema judicial capaz de tratar la situación de todos los prisioneros, un objetivo al cual no se ha dado bastante prioridad”, estimó esta organización.

Según HRW, miles de personas han sido detenidas desde la caída del ex dirigente Muamar Gadafi a fines de agosto, en particular libios negros o africanos de las regiones del sur del Sahara acusados de haber combatido junto a las fuerzas leales a Gadafi.

“Después de todo lo que los libios sufrieron en la prisiones de Gadafi, es desalentador saber que miembros de las nuevas autoridades someten ahora a los prisioneros a detenciones arbitrarias y a violencias”, destacó Joe Stork, subdirector de HRW para Medio Oriente y Africa del Norte.

Según HRW, las prisiones de Trípoli sufren de “saturación y de abastecimientos insuficientes”.

“Los dirigentes del CNT deben resolver este problema en colaboración con las brigadas militares, las autoridades locales, la policía y el ministerio de Justicia”, insistió Stork.

“Los gobiernos y las organizaciones internacionales que dan su apoyo a la transición libia deberían hacer del buen funcionamiento del sistema judicial una prioridad”, agregó.