El presidente del directorio de Aguas Andinas indicó que la venta de acciones de la compañía por parte de Corfo a otros actores no afectará las políticas de la empresa y sus filiales, como tampoco el precio final que pagan los clientes por el agua potable.

Fernando Larraín, presidente del directorio de la Sanitaria indicó que la venta de gran parte del paquete accionario que mantiene Corfo en Aguas Andinas no incidirá en las políticas de trabajo y tarifas para la compañía matriz, ni tampoco para filiales como ESSAL.

Larraín destacó que las acciones han sido adquirados en un nivel importante por parte de distintos actores, pero se mantiene el control de la compañía española Aguas de Barcelona, quien actua como operador, por lo que los cambios de las acciones no inciden en los planes de la compañía.

El presidente del directorio destacó que a pesar de la venta de acciones, las labores de la compañía se mantienen intactas en el sur de Chile a través de su filial Essal, de hecho actualmente se encuentran revisando la calidad del agua potable en zonas afectadas por el volcán Caulle, como también la restitución del servicio en la comuna de Chaitén.

Las declaraciones de Larraín se enmarcaron en los trabajos del directorio de Essal, el cual también preside.