La familia de un cargador de la Vega Monumental, que sufre de epilesia, está desesperada ante su prolongada e inexplicable ausencia, que data del 5 de marzo de este año.

La familia de Sergio Esteban Candia Aravena, de 44 años, soltero, empieza a resignarse a un final triste.

El sábado 5 de marzo fue a trabajar, como lo hacía hace 20 años, como cargador en la vega monumental, pero nunca retornó a su casa en Santa Sabina.

Generalmente regresaba por el camino del tubo, que conecta Lorenzo Arenas con la población Tucapel Bajo, y su hermana Raquel cree que puede estar en el humedal. Tal vez sufrió un ataque de epilepsia y cayó.

Como se desconoce lo ocurrido, las especulaciones dan para todo, desde un asalto en las proximidades de la vega, donde el microtráfico de pasta base campea, hasta otras historias, admitió Carlos Campos, cuñado del desaparecido.

En su búsqueda participaron ya el Gope, la Armada y la PDI y se espera el arribo desde Santiago de perros rastreadores, de la policía civil, para iniciar una búsqueda que la familia espera sea masiva.