La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, afirmó el sábado en Estambul que la influencia externa tendrá escaso impacto en los sangrientos acontecimientos generados por la revuelta en Siria.
“Ningunos de nosotros tiene realmente influencia, salvo cuando decimos lo que creemos y animamos a cambios que esperamos. No sabemos cómo esto va a acabar”, dijo Clinton a la cadena de televisión CNN Turk.
“Lo que ocurre en Siria está rodeado de incertidumbre (…) Muchos de nosotros esperábamos que el presidente (Bashar) Asad haría las reformas necesarias”, añadió.
Los enfrentamientos en Siria deben figurar en la agenda de conversaciones que Clinton mantendrá con líderes turcos el sábado por la tarde.
Ankara, pese a haber mantenido estrechos vínculos con Siria en los últimos años, ha exhortado al presidente Asad a llevar a cabo reformas políticas, y luego expresó su enfado por la renuencia de éste a hacerlo.
El viernes, durante una reunión del grupo de contacto sobre Libia, Clinton había afirmado que el presidente sirio Asad “perdió su legitimidad ante los ojos de su pueblo debido a la brutal represión” contra las manifestaciones
