Uruguay y México se medirán este domingo en la final de la Copa del Mundo de fútbol Sub-17, en una jornada en la que el duelo preliminar será protagonizado por Brasil y Alemania, que buscarán quedarse con el tercer lugar.

En la ronda semifinal, el cuadro uruguayo hizo alarde de contundencia al imponerse 3-0 a Brasil, mientras que el conjunto mexicano mostró garra para eliminar a Alemania por 3-2.

Luego de que los 50 partidos previos de este Mundial infantil se llevaran a cabo en seis sedes del interior de la República Mexicana, llegó el momento para que el título sea disputado en el estadio Azteca de la capital del país, con su capacidad para 105.000 espectadores.

En el duelo estelar de la jornada, a partir de las 18H00 locales (23H00 GMT), uruguayos y mexicanos disputarán la supremacía.

Para llegar hasta esta instancia, el equipo charrúa ha hecho del contragolpe su mejor arma desde la primera ronda. Así se presentó victorioso ante Canadá, también mandó a casa al sorpresivo Uzbekistán y de igual forma despachó a Brasil en la antesala de la final.

Aunque en los últimos partidos el equipo comandado por el entrenador Fabián Coito no ha podido contar con su figura del ataque, Juan Cruz Mascia, lesionado de una rodilla, ha repartido las responsabilidades ofensivas en varios elementos, empezando por el incombustible Elbio Álvarez y rematando con Guillermo Méndez, quien ha sido un relevo de lujo, anotando goles entrando desde la banca.

La escuadra uruguaya llama la atención por ser letal en sus descolgadas, pero también cabe apuntar que cuenta con la mejor defensa del torneo, pues sólo ha recibido tres goles y en cuatro de sus seis juegos ha conservado el cero en el arco defendido por Jonathan Cubero.

El equipo mexicano, manejado por Raúl Gutiérrez, se presentará con la moral en alto por la forma bravía en que venció a Alemania en la ronda anterior. Dándole la vuelta al marcador de manera espectacular, con un gol olímpico y otro de tijera.

En la ofensiva del ataque mexicano destacan Jorge Espericueta, por quien pasa la mayor parte de los balones, y Carlos Fierro, un delantero generoso que anota y además asiste.

Julio Gómez, el héroe de la semifinal ante los alemanes, quien fue duda por la herida en la cabeza que sufrió en ese juego, se reportó listo para alinear en la final.

En contraste, México tiene en la defensa su talón de Aquiles, ya que las desconcentraciones le han causado goles en contra. Sucedió en el arranque del juego inaugural ante Corea del Norte, también ante Alemania. No obstante, el equipo azteca mostró en esos juegos que tiene capacidad de reacción y carácter.

Un aspecto adicional que puede jugar a favor de México o en contra de Uruguay será el apoyo de la afición que el viernes garantizó el lleno del Azteca agotando los últimos boletos disponibles.

En mundiales Sub-17, hay un antecedente entre mexicanos y uruguayos. Fue en 2005 y el triunfo correspondió al Tricolor.

Antes, a las 15H00 locales (20H00 GMT), se definirá el tercer lugar de la competencia con el choque entre brasileños y alemanes.

Para los juveniles amazónicos dirigidos por Emerson Ávila, esta es la oportunidad de despedirse del torneo mostrando un futbol agradable para la tribuna ya que, si bien alcanzó las semifinales, lo hizo gracias a aportes muy específicos de sus jugadores, como el buen toque de Adryan, los remates de cabeza anticipados de Leo o las oportunas definiciones de Ademilson, pero sin desplegar el admirado ‘jogo bonito’.

Luego de la dura eliminación ante el equipo local, los muchachos comandados por Steffen Freund buscarán consuelo por no haber llegado a la final, a pesar de que fueron la mejor ofensiva del torneo, con 20 goles a favor. En la semifinal, tras ponerse en ventaja, asumieron una actitud conservadora, muy distinta a la ambición exhibida en el certamen, y eso les costó la derrota.

Brasil y Alemania se han enfrentado en seis ocasiones previas en Mundiales Sub 17. El balance arroja cuatro triunfos para los americanos, uno para los europeos y un empate.