Muchos hombres no saben distinguir entre una mujer satisfecha sexualmente y una que finge.

Por ello, las especialistas y consejeras de Cosmopolitan Darcy Leadzer, autora de “The 10-Minute Sexual Solution: A Busy’s Couple Guido To Having More Fun, Intimacy and sex” (La solución sexual de 10 minutos: la guía de una pareja ocupada para tener más diversión, intimidad y sexo); y Tracy Cox, autora de “Superhot Sex”, entregan algunos consejos para que ellos puedan descubrir si complacieron a su pareja.

1. Está agitada físicamente

La doctora Darcy Leadzer recomienda escuchar la respiración de ella mientras tienen relaciones sexuales. “Si jadea, aunque sea suavemente, significa que está excitada”, señala.

Explica que la respiración “dice más que un gemido porque es una respuesta involuntaria”.

La experta también aconseja fijarse si el pecho y la zona del cuello se sonrojan, si flecta las piernas, dobla los dedos de los pies, si arquea la espalda o mueve la pelvis rítmicamente.

2. Habla incoherencias

Si notas que una especie de fuerza extraterrestre se apoderó de ella y esboza frases entrecortadas y sin sentido, probablemente es porque está disfrutando. “Si sus palabras no son coherentes es porque está inmersa en las sensaciones” asegura Tracy Cox.

En cambio, si dice frases claras es posible que esté fingiendo.

3. No realiza otras actividades inmediatamente.

Luadzers aclara que “cuando una mujer está sexualmente satisfecha mantiene el contacto físico, se acurruca, conversa y hace todo lo posible para lograr una segunda parte”, agregando que “si no quedó conforme tomará distancia, se levantará de la cama y se vestirá”.

Con respecto al tema, Cox asegura que si una mujer empieza de inmediato a realizar otras actividades “significa que durante el acto sexual las tuvo en mente, por lo que no lo disfrutó y ahora está frustrada”.

4. Ojo con las respuestas escuetas

Si una mujer resume el acto sexual como “bien”, puede que quiera más, pero no se atreva a decirlo. Así lo cree Cox, quien recomienda quebrar el silencio incómodo con algo de humor y no desanimarse.

“Una mujer que no disfrutó del primer acto puede volverse muy sexual cuando un hombre la desafía”, aconseja.