La presidenta de Argentina, Cristina Kirchner, y su par de Bolivia, Evo Morales, inauguran este jueves en la Casa Rosada (gobierno) el gasoducto Juana Azurduy, iniciativa que profundiza la integración energética entre ambas naciones sudamericanas.

La ceremonia con ambos mandatarios incluye una videoconferencia con la ciudad boliviana de Yacuiba para la inauguración de la tubería, que elevará el bombeo a 27,7 millones de m3 diarios de gas natural.

La actividad de Morales continúa el viernes con un acto sindical en apoyo al reclamo de su país de una salida al mar y la concurrencia junto con Kirchner al estadio Ciudad de La Plata, a 60 Km al sur de Buenos Aires, para ver el partido Argentina-Bolivia, debut de la Copa América-2011, dijo una fuente oficial.

Morales comenzó su agenda de dos días en Argentina con un acto en la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) (norte), donde recibió el título de Doctor Honoris Causa ante una sala colmada de estudiantes y docentes que lo ovacionó en el Pabellón Argentina de la sede universitaria.

La distinción le fue otorgada “por la constante defensa de los recursos naturales, la tierra y el territorio”, según la resolución del Consejo Superior de la casa de estudios.

La UNC destacó además a Morales por ser “una figura central del potencial transformador que representan los movimientos sociales latinoamericanos en la defensa de los derechos de los pobres y explotados”.

“No es algo sólo para mí, sino un reconocimiento para todos los pueblos indígenas del continente y su lucha. Es un reconocimiento a la lucha de nuestros antepasados”, agradeció el primer presidente indígena de Bolivia.

El gasoducto Juana Azurduy fue bautizado así en honor a la guerrillera nacida en lo que es hoy territorio de Bolivia y heroína en la lucha por la independencia americana del yugo español en el siglo XIX.

La obra demandó una inversión de 180 millones de dólares, con una longitud total de 48 km, de los cuales 13 Km están en territorio boliviano hasta empalmar con el gasoducto del Nordeste argentino, en construcción, que medirá 1.500 Km y recorrerá cuatro provincias.

La tubería alcanzará finalmente una capacidad de transporte de 27,7 millones de m3 diarios, a partir de 2014, con un contrato de venta de gas boliviano a Argentina por 20 años.

La obra de integración energética había sido acordada en 2006 por el presidente Morales y su entonces homólogo argentino Néstor Kirchner (2003-2007), fallecido en 2010, pero por varios factores sufrió considerables retrasos.

El gasoducto tendrá la capacidad de atender una demanda calculada en 11,6 millones de m3 para el invierno de 2012 y de 13,5 millones de m3 en 2013.

El contrato de compra-venta de gas natural fue celebrado entre el ente energético argentino Enarsa y Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).