Preocupación existe en apoderados de algunos colegios de Valdivia, por la sostenida toma de liceos de estudiantes secundarios. En tanto, los movilizados reafirmaron que esta medida de presión es la única opción que tienen para que las autoridades respondan a sus demandas.

Los 10 días en toma de 12 establecimientos municipalizados, al que se unió el Instituto Salesiano de Valdivia, que es particular subvencionado, ya comienzan a incomodar a algunos padres que quieren que sus hijos no pierdan clases.

Es el caso de algunos apoderados del colegio Juan Sebastián Bach, ya que producto de la toma del recinto de los secundarios, los niños del ciclo básico, muchos de ellos además de perder clases, tampoco acceden a los almuerzos, como lo dijo a La Radio el presidente del 1ero Básico, Hugo Soto.

Marcela Garrido, otra apoderada del establecimiento, aseguró que los niños al no encontrarse con clases, muchas veces quedan dando vuelta y prácticamente a la deriva.

Enrique Sánchez, presidente del Centro de Padres y Apoderados del Liceo Armando Robles, anunció una reunión con los estudiantes y apoderados para destrabar la movilización.

Ante esto, la presidenta de la Federación de Estudiantes Secundarios de Valdivia, Jean Morin Fuentes, indicó que hasta ahora de los apoderados no han recibido apoyo o rechazo al movimiento.

La dirigenta estudiantil reconoció que hay millonarias pérdidas en subvención escolar a raíz de las tomas de liceos, pero ante ello respondió que gracias a estas medidas de presión son escuchados por las autoridades.

La toma de recintos continúa de manera indefinida en los 12 establecimientos, salvo el Instituto Salesiano que resolverá su accionar la tarde del sábado, cuando sean informados sobre lo que dictamine la Asamblea de Secundarios en Santiago, en cuanto al devenir de la movilización.