El Mundial de fútbol femenino de 2011 se disputa del 26 de junio al 17 de julio en Alemania, el campeón de las dos últimas ediciones del torneo, un país donde este deporte alcanza cotas récord de popularidad y de implantación, lo que le convierte en un inmejorable trampolín.

Con más de un millón de niñas y jóvenes jugando al fútbol en clubes o competiciones de la Federación Alemana (DFB), Alemania se ha convertido en un auténtico modelo, en un momento de expansión y promoción de este deporte, de la mano de las autoridades y de los responsables del fútbol nacional.

Coincidiendo con los preparativos del Mundial masculino de 2006, la DFB lanzó en la temporada 2004-2005 un ambicioso programa para promover el fútbol entre las niñas en los centros educativos: en seis años, el número de clubes se ha duplicado, pasando a casi 7.000.

En los planes en colegios se incluyó entre 2006 y 2007 dotar a 22.000 escuelas con 100.000 balones y 400.000 equipos de entrenamiento, para conseguir que la ‘futbolmanía’ continuara en los centros, y especialmente entre las nuevas deportistas, tras el Mundial de hombres de 2006.

“Es una gran oportunidad para demostrar la importancia del fútbol femenino. Creo que nuestra imagen como país se define mejor con este tipo de acontecimientos que con un acto o una cumbre política”, destacó el responsable alemán de Exteriores, Guido Westerwelle, sobre el carácter popular del Mundial.

La canciller Angela Merkel, que grabó un mensaje promocional del evento, también ha sido otro de los apoyos institucionales para difundir al mundo que Alemania-2011 quiere ser el Mundial femenino más brillante de la historia.

Si la ‘Mannschaft’ masculina no gana un gran título desde la Eurocopa de Inglaterra-1996, el equipo femenino sí ha triunfado al máximo nivel y se ha impuesto en las dos últimas ediciones del Mundial (2003 y 2007), lo que le convierte en el mejor equipo del planeta.

Está dirigido por la considerada por la Federación Internacional (FIFA) como la mejor entrenadora del mundo, Silvia Neid, y cuenta en sus filas con varias estrellas internacionales, principalmente Birgit Prinz, que aspira a destronar a la brasileña Marta como próxima triunfadora en la gala anual del Balón de Oro.

“El fútbol femenino ha hecho progresos enormes. El listón está altísimo”, comentó la leyenda alemana Franz Beckenbauer a la página de la FIFA. “Se puede apreciar un claro avance, sobre todo en el aspecto táctico”, estimó.

La clave del éxito, señalan desde la DFB, está en la base. Junto a los éxitos de las selecciones nacionales destacan los de los clubes, más de veinte años después de la fundación de la Bundesliga femenina en 1990, con veinte equipos.

En la Liga de Campeones femenina, los clubes de la Bundesliga han ganando seis de las diez ediciones disputadas, la última de ellas en 2010 con el Turbine Potsdam. En el palmarés de la ‘Champions’ de mujeres, el FFC Fráncfort es el equipo más laureado, con tres títulos.

En 2010, el Mundial femenino Sub-20, albergado y ganado por Alemania, sirvió de ensayo general para esta Copa del Mundo absoluta, donde los anfitriones quieren seguir confirmando su hegemonía.