El cuestionado presidente de Yemen, Alí Abdalá Saleh, hospitalizado en Riad tras un ataque contra su palacio en Saná el 3 de junio, “no va a volver a su país”, afirmó el viernes a la AFP un responsable saudí, pese a que el régimen yemení informa de su “inminente” regreso.

“El presidente no volverá a Yemen”, declaró el responsable, que requirió el anonimato, sin querer precisar si se trata de una decisión de Saleh o del reino que le acoge.

“Su lugar de residencia no ha sido fijado aún”, añadió, dando a entender que podría dejar Arabia Saudita.

Saleh fue hospitalizado en Arabia Saudita tras haber sido herido por una explosión en la mezquita de su palacio residencial el pasado 3 de junio en Saná. Desde entonces, no apareció en público e informaciones contradictorias circulan sobre su verdadero estado de salud.

En Saná, el viceministro yemení de Información, Abdo al Janadi, afirmó a la AFP que “el presidente Saleh regresará a Yemen en los próximos días”, sin querer dar más precisiones.

Janadi había declarado el miércoles que el estado de salud del presidente estaba “en constante mejoría”.

Pero una fuente yemení en Riad aseguró la pasada semana que el estado de salud de Saleh era “malo, principalmente porque sufre problemas pulmonares y dificultades respiratorias”.

El jefe del Estado, de 69 años, sufre de quemaduras provocadas por la explosión. Once de sus guardaespaldas fallecieron en el ataque y 124 personas resultaron heridas, entre ellas varios dirigentes políticos como el primer ministro Ali Mohamed Mujawar y el presidente del Parlamento Abdelaziz Abdelghani, que también fueron trasladados a Arabia para ser atendidos.

Desde su marcha, los jóvenes manifestantes que iniciaron en enero un movimiento de contestación contra el régimen y que reclaman la salida del poder de Saleh presionan al vicepresidente del país, Abed Rabbo Mansur Hadi, para que constituya un consejo interino con el fin de asegurar la transición del poder.

Este viernes volvieron a celebrarse masivas manifestaciones en Saná para reclamar un cambio en el poder.