El gobierno de Venezuela debe tomar “medidas concretas” para resguardar la vida de los presos, afirmó este jueves la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que condenó la muerte de 19 reos en una reyerta el domingo pasado.

“La CIDH urge al Estado venezolano a adoptar acciones de impacto inmediato en la grave situación de riesgo en que se encuentran las personas privadas de libertad”, indicó un comunicado.

La comisión, ente de la Organización de Estados Americanos (OEA), señaló que en febrero de 2008 dictó medidas cauteleras para que el gobierno venezolano protegiera la vida de los presos de la cárcel de El Rodeo, a 40 km de Caracas, donde se habrían producido las muertes por los enfrentamientos.

La CIDH ha venido “dando seguimiento a la preocupante situación de las personas privadas de libertad en Venezuela a través de todos los mecanismos disponibles”, explicó el comunicado.

Según la información que maneja la CIDH, las cárceles están sobrepobladas y en ellas murieron 476 reclusos en 2010.

La CIDH ha reiterado en numerosas ocasiones la responsabilidad del gobierno venezolano de garantizar la seguridad en las cárceles.

La comisión recomendó disminuir el hacinamiento, decomisar las armas dentro de las cárceles, separar debidamente a los condenados y garantizar el número suficiente de custodios, entre otras medidas.