“Más fácil que robarle un dulce a un niño”, reza el refrán popular. Pero no cuando se trata de la era digital, una era llena de cámaras por todas partes y de Internet.

Eso es lo que aprendió esta mujer que, durante un partido de béisbol, se aprovechó de una pequeña niña para apropiarse de la pelota que ella legítimamente había atrapado, sin saber que una cámara la estaba enfocando, que la estaban transmitiendo en directo por televisión y que -además- la evidencia sería cargada en YouTube, donde ya suma más de 100.000 visitas.

Ahora el dicho será “Más fácil que sorprender a un adulto y dejarlo en ridículo por Internet”.

http://www.youtube.com/watch?v=6locBvdMJtw