El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, acompañará al presidente Juan Manuel Santos en el acto de sanción de una ley para reparación de víctimas del conflicto armado, en una visita este viernes a Colombia, primer punto de una gira por Suramérica.

La ceremonia para la promulgación de esta ley, que se realizará en la sede de la presidencia al final de la tarde del viernes, será la actividad más destacable de Ban en Colombia, país donde permanecerá hasta el domingo, cuando seguirá viaje a Argentina, Uruguay y Brasil.

La ley para la reparación y restitución de tierras a las víctimas del conflicto armado, que Santos presentó personalmente a los parlamentarios en 2010, fue aprobada por el Congreso hace dos semanas.

En ese momento, Santos anunció que esperaría la llegada de Ban para sancionarla en su presencia, con la intención de darle mayor relevancia a esta ley, que considera la iniciativa más importante de su gestión (2010-2014).

La ley debe cobijar a las personas que han sufrido el conflicto armado de casi medio siglo en Colombia, aunque solo indemnizará a las víctimas de grupos guerrilleros, paramilitares y de agentes de la fuerza pública a partir de 1985 (cerca de 4 millones) y restituirá tierras a desplazados por la fuerza a partir de 1991 (unas 400.000 familias).

La legislación contempla también el apoyo psicocial a las víctimas, y medidas de reparación simbólica como el establecimiento de la verdad sobre lo ocurrido y la preservación de la memoria histórica.

Esta norma tendrá una vigencia de 10 años y su principal desafío será devolver a campesinos desplazados 2 millones de hectáreas de tierras que les fueron arrebatadas y otras 4 millones de hectáreas que quedaron en el abandono, según el ministro de Agricultura, Juan Carlos Restrepo.

Para ello, se llevarán a cabo juicios abreviados, con inversión de la carga de la prueba. Pero diversos organismos humanitarios, entre ellos la Oficina de la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, han alertado de que el mayor riesgo a conjurar será el de violencia contra los desplazados.

Desde que el gobierno de Santos anunció su intención de devolver al menos 2,5 millones de hectáreas entre 2010 y 2014, diez dirigentes campesinos han sido asesinados. El caso más reciente, el de Ana Fabricia Córdoba, ocurrió esta misma semana en Medellín (400 km al noroeste de Bogotá).

Después de la ceremonia de promulgación de esta ley, Ban se reunirá en Bogotá con la secretaria general de la Unión Suramericana de Naciones (Unasur), la colombiana María Emma Mejía, y luego tendrá una cena privada con Santos.

El secretario general de la ONU también acompañará al presidente colombiano a una visita el sábado a comunidades en la costa Caribe afectadas por las fuertes lluvias que desde 2010 han dejado 469 muertos, y estará junto con el mandatario en su programa semanal Acuerdos por la prosperidad, que se emitirá desde Cartagena (1.090 km al norte de Bogotá).

El domingo, Ban visitará proyectos de agencias de Naciones Unidas en la población de Soacha, en la periferia sur de Bogotá, donde se asienta la mayor cantidad de desplazados internos de Colombia.

Hacia las 13H00 locales (18H00 GMT) del domingo, proseguirá viaje a Buenos Aires.

La ONU y sus diferentes agencias han sido durante años la principal voz de denuncia a las violaciones de derechos humanos en Colombia, lo que provocó roces con el anterior gobierno del ex presidente Alvaro Uribe (2002-2010).

Colombia ocupa este año y el próximo un asiento no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU.

La última visita oficial de un secretario general de la ONU a Colombia la realizó Javier Pérez de Cuéllar en 1990.

Ban anunció esta semana su intención de buscar un nuevo período de cinco años como secretario general de Naciones Unidas, cargo al que accedió en 2007.

Ya Estados Unidos, la Unión Europea y Uruguay le manifestaron públicamente su apoyo. La Asamblea General de la ONU hará una votación antes que finalice junio.