El vicepresidente de China, Xi Jinping, elogió el sábado en una declaración escrita las reformas económicas que impulsa en Cuba el presidente Raúl Castro, con quien se reunirá en La Habana para profundizar las relaciones de cooperación.

Xi, que llegó a Cuba procedente de Italia en una gira que también incluye a Uruguay y Chile, afirmó que el reciente VI Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC, único), que aprobó el plan de más de 300 reformas, “marcó el rumbo para el futuro desarrollo del país”.

En nombre del Partido Comunista y del gobierno de China, el vicepresidente expresó “sinceros votos porque el pueblo cubano conquiste sin cesar mayores éxitos en la construcción del socialismo”.

“Mi presente visita tiene como propósito ampliar las coincidencias, incrementar la amistad y profundizar la cooperación en procura conjunta del desarrollo”, destacó Xi, recibido en el aeropuerto por el vicepresidente Esteban Lazo.

Durante su visita a Cuba, de poco más de dos días, Xi se reunirá con Raúl Castro para, según dijo, tener “un profundo intercambio de opiniones sobre las relaciones bilaterales y los trascendentales temas internacionales y regionales de interés común”.

Raúl Castro recibirá a Xi el domingo en el Palacio de la Revolución, donde suscribirán nuevos acuerdos de cooperación -en sectores no precisados-, según la agenda oficial.

Xi viaja acompañado por varios funcionarios, entre ellos el presidente del Banco de Desarrollo de China, Che Yuan, y durante su estancia en Cuba también visitará una policlínica universitaria en La Habana.

China es el segundo socio comercial de Cuba -después de Venezuela- con un intercambio que empezó a recuperarse al pasar de unos 1.500 millones de dólares en 2009 -cuando cayó en 30%- a 1.800 millones el año pasado, según la embajadora china, Liu Yuqin.

Esta es la primera visita de un funcionario chino de alto rango después del Congreso del PCC, que aprobó las reformas de apertura económica con que Raúl Castro busca hacer eficiente el agotado modelo cubano, de corte soviético y excesivamente centralizado.

China, vital fuente crediticia y aliado político, tiene en Cuba múltiples inversiones en transporte, petróleo, equipos electrodomésticos y de comunicación e infraestructura turística.