Las autoridades chinas desplegaron el lunes un gran dispositivo de seguridad en la región de Mongolia Interior (norte) para impedir que continúen las manifestaciones de la minoría étnica mongol.

Los miembros de esta minoría, que afirman ser víctimas de una represión política y cultural similar a la que afecta a los tibetanos, hicieron circular un llamado a reunirse, en un contexto de gran tensión con las autoridades, pertenecientes en su mayoría a la etnia han, la predominante en China.

La semana pasada los mongoles protagonizaron manifestaciones de una magnitud sin precedentes para reclamar el respeto de sus derechos en esta región autónoma, según el Centro de información para los derechos humanos en Mongolia del Sur, una organización con sede en Estados Unidos.

El lunes se prohibía el acceso a universidades y espacios públicos al aire libre en varias ciudades, sobre por el temor de Pekín a un movimiento de protesta como el que agitó durante los últimos meses el mundo árabe.

“La situación aquí es actualmente delicada”, declaró a la AFP un policía en uniforme delante de una escuela de Xilinhot, sede de las autoridades de la región.

Según dos habitantes, unos alumnos de esta escuela, a la que se impidió acceder a la AFP, participaron en recientes manifestaciones.

Las manifestaciones de los mongoles comenzaron el lunes 23 de mayo en varios lugares de la región para protestar contra la muerte, el 10 de mayo, de un pastor arrollado por un vehículo conducido por un han, la etnia dominante en China.

Los hechos se produjeron cuando este pastor, junto con otros, trataba de bloquear un convoy de camiones que transportaba carbón a la región de Xilingol, donde la actividad minera provoca el éxodo de los pastores mongoles, al destruir sus pastizales, según la mencionada ONG.

El viernes, 300 policías antidisturbios se enfrentaron a cientos de manifestantes, estudiantes y pastores, en el distrito de Shuluun Huh.

En la capital regional, Hohhot, la policía también estaba presente en los lugares estratégicos. Las principales universidades habían mantenido cerradas sus puertas.