La federación internacional de bádminton (BWF) decidió renunciar a un proyecto de reglamentación que obligaría a las jugadoras de la disciplina a llevar faldas y vestidos, una medida que levantó protestas entre deportistas y federaciones nacionales.

“La federación aceptó una recomendación del comité femenino de la BWF que pide un estudio con profundidad sobre la reglamentación sobre indumentaria y decidió renunciar a la obligación de llevar faldas o vestidos”, indicó la BWF en un comunicado, tras una reunión del comité director en Qingdao el sábado.

La BWF también anunció que el próximo mes de diciembre se llevará a cabo una nueva propuesta.

Los responsables de la federación negaron en todo momento que la polémica medida fuera sexista y aseguraron que el objetivo era sólo mejorar “el estilo y la estética” para atraer a más espectadores.