El ministro de Defensa de El Salvador, general David Munguía, anunció este viernes la detención de seis militares, dos suboficiales y cuatro soldados, acusados del robo de 1.800 granadas que iban a ser vendidas al crimen organizado.

“No debemos permitir que el crimen organizado nos penetre. Hemos logrado desarticular esta estructura en la que están involucrados lamentablemente éstos elementos de la Fuerza Armada”, señaló el general Munguía en una rueda de prensa.

Según indagaciones efectuadas por el Ejército, los seis detenidos -que no fueron identificados públicamente para no entorpecer las investigaciones-, estaban asignados por la Fuerza Armada al área de destrucción de armamento en desuso, lo que les facilitó el acceso a las granadas.

Según el ministro de Defensa, las granadas se hallaban enterradas en una zona que el Ejército utiliza para ese tipo de cometido en el departamento de La Paz (sur), listas para ser “vendidas al crimen organizado”.

Los seis militares acusados del robo están recluidos a la espera de juicio en un penal en el departamento de Santa Ana (oeste).