Red Hat anunció este martes la firma de un acuerdo junto a la Universidad Central que incorpora a la su programa mundial “Red Hat Academy”. El convenio permitirá que los estudiantes del Community College de Santiago se capaciten en temas de Código Abierto, para ampliar sus posibilidades de trabajo.

Cecilia Arrillaga, directora de Educación de la Región Sur y Andina de Latinoamérica de Red Hat, señaló que “el objetivo del programa es colaborar con la comunidad académica en la formación sobre software de Código Abierto. Las instituciones miembro del Programa tienen acceso a suscripciones Red Hat para uso académico y acceso a capacitación web sobre administración de sistemas”.

Con la Universidad Central, ya son 3 las instituciones chilenas de educación superior que forman parte de “Red Hat Academy”, junto con Inacap y Duoc UC. Además, en latinoamérica se incluyen entidades educativas de países como Costa Rica, El Salvador, México y Colombia.

“Esta acreditación permitirá a nuestros estudiantes trabajar en cualquier parte del mundo, lo que para nosotros es muy importante, debido a que viene a complementar la doble titulación que entrega el Community junto con La Guardia Community College de la Universidad de la Ciudad de Nueva York”, indicó Sergio Quezada, Director General del Community College de Santiago.

La firma del convenio fue presidida por Ernesto Livacic, Presidente de la Junta Directiva de la Universidad Central; Ezequiel Picardo, Gerente General de RedHat Chile, y Cecilia Arrillaga, Directora de Educación de la Región Sur y Andina de Latinoamérica de Red Hat.

El Community College de Santiago (CCS) de la Universidad Central de Chile, es un proyecto en el área educacional del país que pretende fortalecer el desarrollo económico y social de Chile, formando profesionales técnicos al más alto nivel, con las habilidades necesarias para desempeñarse en el mercado laboral con estándares internacionales.

El proyecto gestionado en forma conjunta con LaGuardia Community College, de la Universidad de la Ciudad de Nueva York, promueve un sistema dinámico basado en la gradual adquisición de competencias, con una integración vertical, es decir, permite a los estudiantes avanzar progresivamente desde un oficio a una carrera Técnica de Nivel Superior de 2 años y posteriormente, continuar una carrera profesional en la universidad, reconociendo todos sus créditos cursados.