El presidente boliviano, Evo Morales, expresó este martes su deseo de que el juez español Baltasar Garzón sea uno de los asesores internacionales de Bolivia en el diferendo marítimo que piensa interponer contra Chile ante el Tribunal de La Haya.

“Vamos a reunirnos, esperemos que sea uno de nuestros asesores internacionales para nuestra demanda”, dijo Morales en una improvisada reunión con periodistas locales a quienes homenajeó por su aniversario.

Garzón, que promovió un proceso de arresto contra Augusto Pinochet, “realmente es un hombre con mucha conciencia de la justicia, mucha experiencia, mucho conocimiento, me he quedado admirado de esta clase de expertos en abogacía”, señaló Morales.

El presidente boliviano, que en marzo anunció que presentará un contencioso ante La Haya contra Chile, agregó que “también me he contactado con algunos argentinos, nicaragüenses”, para brindar asesoramiento.

Baltasar Garzón es actualmente asesor del Tribunal Penal Internacional de La Haya.

A pesar de sus anuncios de recurrir a tribunales internacionales, Morales dijo a fines de abril que “Bolivia jamás va a romper el diálogo con Chile” y, en ese sentido, abrió la posibilidad de un eventual encuentro con su par chileno, Sebastián Piñera, en los actos del bicentenario de Paraguay en Asunción.

La Paz dijo en marzo que apelará a tribunales internacionales para buscar una solución al problema de su mediterraneidad, aunque Santiago opinó que no puede continuar negociando si hay en curso un contencioso.

Bolivia perdió en una guerra ante Chile los 400 km de costa sobre el Pacífico que tenía (lo que actualmente es la Región de Atacama) y 120.000 km2 de territorio.

Además, reclama la propiedad del manantial Silala, un acuífero que surte la región chilena de Atacama, canalizado artificialmente por Chile para usufructo gratuito, con el argumento de que se trata de un río de cauce sucesivo y natural sobre el que tiene derechos.

Acerca del río Lauca, que nace en Chile y termina en Bolivia, el gobierno boliviano denunció en 1962 que su contraparte chilena lo desvió unilateralmente, haciendo mermar su cauce.