Trece profesores hondureños iniciaron este miércoles un ayuno de 24 horas en protesta por haber sido suspendidos de su trabajo a causa de un cese de labores entre marzo y abril pasado, constataron periodistas de la AFP.

Los educadores se instalaron en colchones en la parte baja del edificio del Congreso Nacional, en el centro de Tegucigalpa.

“Estamos dando inicio a una huelga de hambre en protesta porque estamos suspendidos desde el 11 de abril un total de 305 docentes”, dijo a la AFP una de las participantes, Yanina Parada, profesora del instituto Central Vicente Cáceres de la capital.

“Estamos defendiendo nuestros derechos, reclamamos el reintegro de los suspendidos por dos o seis meses por defender la educación pública y nuestro instituto de previsión”, añadió Parada, quien anunció que más profesores se irán sumando al ayuno que inicialmente es de 24 horas.

El gobierno hondureño suspendió por dos y seis meses a 305 dirigentes gremiales de la educación por participar en un paro de actividades que duró cinco semanas, según el anuncio publicado en el diario oficial La Gaceta.

El gobierno publicó un texto en el cual acuerda “suspender sin goce de sueldo” por dos y seis meses de calendario a partir del 11 de abril, a 305 dirigentes magisteriales.

Los 305 educadores sancionados realizaron la huelga en protesta porque el Congreso buscaba aprobar una ley, aprobada finalmente por el Congreso, que según ellos municipaliza la educación.

También exigían un millonario pago que el gobierno adeuda en cotizaciones como patrono y por deducciones a los educadores al Instituto de Previsión del Magisterio (Inprema).

Los profesores terminaron cediendo y retornaron a clases el lunes luego de que el gobierno declaró una “emergencia educativa” y amenazó con despedirlos. Finalmente decidió suspenderlos.