El español Dani Pedrosa (Honda), operado hace tres semanas en un hombro, evidenció su recuperación con una brillante victoria en la carrera de MotoGP del Gran Premio de Portugal ante su compatriota Jorge Lorenzo (Yamaha), segundo del día y aún líder de la general.

La diferencia entre Lorenzo y Pedrosa era de nueve puntos en las dos primeras posiciones del Mundial antes de la carrera del domingo en Estoril, pero el margen se redujo a apenas cuatro. Pedrosa, con dolores por su lesión en las anteriores citas en Qatar y España, se mostró además mucho más cómodo.

Stoner, ganador en Qatar y primer líder de la general este año, tuvo que conformarse con la tercera posición del día, a más siete segundos y medio de su compañero de equipo Pedrosa. Lorenzo, por su parte, entró en la meta tres segundos después del ganador.

El catalán nunca había conseguido la victoria en Portugal en la categoría reina, mientras que Lorenzo, ganador en Estoril las tres últimas temporadas, tiene que conformarse con un amargo segundo puesto en su “circuito talismán”, tras salir de la ‘pole’ y dominar gran parte de la carrera.

El vigente campeón mundial, favorito para la victoria, vio cómo Pedrosa, que empezó tercero, plantó cara desde el primer momento y mantuvo un constante acoso durante 24 vueltas.

Una vez que pasó al liderato provisional, Pedrosa cobró pronto una ventaja considerable -medio segundo en una única vuelta-, privando a Lorenzo de la victoria.

El italiano Marco Simoncelli (Honda), el hombre más rápido de los ensayos libres en Portugal y que quedó segundo el sábado en las clasificaciones, se fue al suelo antes del final de la primera vuelta, igual que el español Héctor Barberá.

El también italiano Valentino Rossi (Ducati), que comenzó en la tercera línea de la parrilla, firmó un gran arranque y en la primera vuelta ya pasó al cuarto puesto, que mantuvo hasta el final, cuando fue superado por su compatriota Andrea Dovizioso (Honda).

En Moto2, la victoria fue para el alemán Stefan Bradl (Kalex), que quedó en el podio por encima del español Julián Simón y el japonés Yuki Takahashi, segundo y tercero respectivamente.

La carrera fue especialmente complicada para Bradl, que vio por dos ocasiones cómo dos hombre le superaban en cabeza, el suizo Thomas Luthi y el italiano Andrea Iannone, antes de irse al suelo y permitir al alemán recuperar con fortuna el control de la prueba.