El presidente estadounidense Barack Obama llamó el sábado al rey de Bahréin a respetar los “derechos universales del pueblo”, dos días después de que el pequeño estado del Golfo Pérsico sentenciara a varios manifestantes a muerte.

Autoridades de Estados Unidos han criticado a Bahréin por la velocidad del juicio en el cual manifestantes chiítas pro-democracia fueron sentenciados a muerte y a cadena perpetua por la muerte de dos policías.

En su conversación telefónica con el rey Hamad, Obama dijo que Estados Unidos “cree que la estabilidad de Bahréin depende del respeto de los derechos universales del pueblo de Bahréin, y de un proceso de reforma significativa que responda a las aspiraciones de todos los bahreiníes”, dijo la Casa Blanca en un comunicado.

Bahréin, sede de la 5ta Flota de Estados Unidos, responsable de las fuerzas norteamericanas en la región, fue objeto de protestas de mediados de febrero a mediados de marzo como parte de las revueltas en el mundo árabe.

Una corte militar sentenció el jueves a cuatro manifestantes chiítas a muerte y a tres a cadena perpetua por la muerte de dos policías durante la represión de una protesta.

Las autoridades de Bahréin han sido fuertemente criticadas por organizaciones de derechos humanos internacionales por la violenta represión a los manifestantes de la comunidad chiíta mayoritaria en este reino gobernado por una dinastía sunita.