Este viernes las familias más vulnerables pertenecientes al programa Chile Solidario de la región de Valparaíso, comenzarán a recibir el bono de asignación familiar, que consiste en un beneficio en dinero por cada integrante.

La iniciativa será ingresada al Congreso como proyecto de ley para transformarla en una política permanente.

La idea es que las familias adquieran un cierto compromiso social, premiando a aquellas que cumplen requisitos como no desertar del colegio y que mujeres jefas de hogar tengan empleo.

En este sentido, el secretario regional ministerial de Mideplan, Tomás Ochoa, señaló que se trata de un sistema de deberes y derechos, donde se les garantiza un mínimo social, pero también se les exige un compromiso con el Estado, para que no se convierta este beneficio en una trampa social.

Tomás Ochoa agregó que la idea es ingresar un proyecto de ley para que sea una política permanente, donde los resultados se podrán ver a fin de año, a través de la encuesta Casen, constituyéndose como el primer paso para la implementación del ingreso ético familiar.

En la región de Valparaíso, 43.000 familias podrán acceder al beneficio, que según el grupo variará de 4.500 a 7.500 pesos por cada integrante del núcleo familiar.

La autoridad del ramo estima que en promedio una familia recibirá cerca de 40 mil pesos mensuales, como componente de protección social.