Los peritajes balísticos realizados en el departamento donde vivía Ítalo Nolli Olivan, el principal sospechoso de la balacera que dio muerte a 2 detectives de la Policía de Investigaciones y que dejó varios heridos, arrojaron una serie de datos.

Según las primeras informaciones, en este departamento fueron encontradas más de 3.000 municiones -balas de calibre 22 y, presuntamente, de aquellas de guerra además de cartuchos de tipo francotirador-. Además, se pudo visualizar un casco de guerra y una mascarilla.

Asimismo, los peritos que trabajaron por alrededor de 4 horas señalaron que, antes de ser abatido en pleno centro de Santiago, Nolli abandonó en las cuadras aledañas cerca de 600 balas.

También, se indicó que en la camioneta roja del sospechoso se encontraron 7 armas de fuego.