El regreso de los KERS y de las consignas son dos de los grandes cambios que presenta el Mundial-2011 de Fórmula 1, que comienza este fin de semana con el Gran Premio de Australia, aunque hay otras modificaciones, como la inclusión de nuevos alerones.

Los KERS se probaron en 2009 y se prohibieron en 2010, pero este año ese sistema de aprovechamiento energético, que convierte la fuerza de frenada en caballos añadidos (unos 80, durante siete segundos por vuelta), vuelven a los monoplazas.

Pese a que en 2009 permitieron realizar algunos adelantamientos espectaculares al inicio de las carreras, algo de lo que se aprovechó sobre todo el británico Lewis Hamilton, de McLaren, dos de las cuatro escuderías que los desarrollaron (Renault y BMW Sauber), llegaron a dejar de utilizarlos.

Por su parte, Ferrari y McLaren sólo lograron demostrar la conveniencia del sistema en raras ocasiones, mientras que los mejores monoplazas, los de las escuderías Brawn GP y Red Bull, carecían de los KERS.

Sin embargo, la imagen de los KERS ha cambiado este año por ser una tecnología ecológica, consideración que ha contribuido a que varias escuderías los adopten.

Salvo el Team Lotus, Virgin y Hispania, tres equipos que llegaron a la Fórmula 1 en 2010, todas las escuderías los utilizarán, por lo que sus efectos en la competición deben tender a anularse.

Los alerones traseros ajustables es una medida que también tiene previsto mejorar el rendimiento de los coches, especialmente en los adelantamientos, algo que lleva a pensar que la medida favorecerá el espectáculo.

En los últimos años, las perturbaciones aerodinámicas generadas por un monoplaza hacían que el coche que venía detrás tuviera dificultades para mantenerse estable, por lo que realizar adelantamientos era algo muy difícil.

Pero los alerones regulables podrían resolver este problema. Porque si un coche se encuentra a menos de un segundo de otro antes de la última recta del circuito, el perseguidor podrá recibir el visto bueno de los comisarios de la carrera para regular la posición del alerón trasero, una maniobra que le hará ganar velocidad.

Según las primeras estimaciones, el coche que modifique la posición de su alerón en estas circunstancias ganará entre siete y quince kilómetros por hora, pudiendo superar al coche que le precede.

Lejos de la técnica, la mayor modificación es el regreso de la consignas de equipo, prohibidas tras el uso abusivo que les dio la escudería italiana Ferrari, en 2002, para favorecer al alemán Michael Schumacher.

Su autorización, por decisión de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), se produce después de una polémica en la que estuvieron implicados, en el Gran Premio de Alemania, los dos pilotos de la ‘Scuderia’, el brasileño Felipe Massa y el español Fernando Alonso.

Además, en 2011, los pilotos tendrán que respetar un código de buena conducta, de ‘fair-play’, ya que los comisarios de las carreras podrán castigar comportamientos impropios sobre las pista, como el zigzaguear para evitar un adelantamiento.

En el Mundial que comienza el domingo, ese tipo de maniobras, empleada sobre todo por Schumacher para evitar que le superara el brasileño Rubens Barrichello en el último Gran Premio de Hungría podrían costar duras sanciones.

Finalmente, no sólo los comisarios podrán sancionar, ya que a partir del Gran Premio de Australia, un piloto podría ser castigado por su deficiente rendimiento.

Así, quien haya firmado como mejor crono un tiempo superior al 107% del primer registro de la primera serie de clasificaciones (Q1) no participará en la carrera. Las escuderías más débiles, como son Hispania y Virgin, sufrirán si no están a la altura.