El operador telefónico estadounidense AT&T anunció el domingo haber alcanzado un acuerdo con su competidora alemana Deutsche Telekom para comprar su filial T-Mobile USA, en una transacción valorada en unos 39.000 millones de dólares.
La operación, anunciada en un comunicado conjunto de AT&T y Deutsche Telekom, se realizará con al menos 25.000 millones de dólares en metálico, y el resto en acciones.
AT&T se queda así con una filial de la que Deutsche Telekom quería deshacerse debido a un desempeño insuficiente, y debería retomar el primer lugar de la telefonía móvil en Estados Unidos, posición que había perdido ante Verizon a comienzos de 2009.
En total, AT&T ganará aproximadamente 37,7 millones de clientes (la parte del mercado de T-Mobile es de 12,2%), lo que le permitirá, según la empresa, aumentar de 58.500 millones a 80.000 millones de dólares el volumen de negocios de la telefonía móvil.
“Con capacidades adicionales en frecuencia y en red, podemos responder mejor a las exigencias actuales de nuestros clientes, construir para el futuro y ayudar a cumplir el objetivo del presidente (Barack Obama) de ‘un Estados Unidos conectado sin cable y con banda ancha’”, dijo el director ejecutivo de AT&T, Randall Stephenson, citado en un comunicado.
