La Corte Suprema rechazó los recursos de casación presentados en contra de una sentencia de la Corte de Apelaciones de Santiago que condenó a dos gendarmes por el delito de apremios ilegítimos de detenidos en el penal de Colina II.

En fallo unánime, los ministros de la Segunda Sala Nibaldo Segura, Rubén Ballesteros, Jaime Rodríguez, Hugo Dolmestch y Carlos Künsenmüller, determinaron que no se ha producido ningún tipo de vulneración de derechos al determinar las siguientes condenas:

-Héctor Hinostroza Vásquez: 300 días de presidio por su responsabilidad como autor de aplicación de tormentos o apremios ilegítimos a persona privada de libertad. Se concedió beneficio de remisión condicional.

-Miguel Espinoza Allende: 300 días de presidio por su responsabilidad como autor de aplicación de tormentos o apremios ilegítimos a persona privada de libertad. Se concedió beneficio de remisión condicional.

La sentencia de la Corte Suprema ratifica la resolución de la Tercera Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago que, el 29 de enero de 2009, determinó que los gendarmes eran responsables de los apremios que afectaron a dos detenidos del módulo Alfa del recinto penal.

Los hechos se remontan al 3 de enero de 2002 cuando dos internos privados de libertad resultaron con lesiones graves: perforación de tímpanos, contusiones graves, esquimosis de diversos tipos, tras ser traslados a dicha zona del penal (módulo Alfa).