La Gobernación de Concepción notificó a la empresa Pingueral, que controla el balneario privado de la comuna de Tomé, para que retire la barrera de ingreso al sector residencial, cercado para el no paso de vehículos, pese a que la calle constituye un acceso de uso público.
Con un ir y venir de resoluciones del Gobierno y también a la espera de determinaciones de la justicia, transcurre el polémico caso del balneario Pingueral, que goza de una barrera de ingreso al lugar que sólo distingue a propietarios, esto a partir de un acuerdo que según empresas Pingueral fue celebrado con el municipio de Tomé.
Superado el acceso a Pingueral por la vía peatonal, a partir de la libertad de ingreso a playas, Bienes Nacionales pidió por oficio a la Gobernación de Concepción que notificara a empresas Pingueral del retiro obligatorio de la barrera de acceso.
La orden emanó de la autoridad el jueves recién pasado y que debiera darse por cumplida con plazo prentorio el próximo martes, según comentó el Gobernador Carlos González.
Según el Gobierno, la ordenanza municipal que argumenta empresas Pingueral, acordada con la administración comunal de Tomé, está fuera de la legalidad, por lo tanto no tiene validez.
