El juez que investiga los errores cometidos por el Servicio Médico Legal (SML) en la identificación de los restos óseos del Patio 29 del Cementerio General, Alejandro Solís, entregó a la familia de dos de las víctimas, los restos de sus seres queridos correctamente individualizados.

Se trata de las osamentas de Mario Eduardo Casanova Pino (34) y Orlando Miguel Ponce Quezada (16), ambos detenidos desaparecidos desde octubre de 1973 y sus familias nunca habían recibido antes restos asociados a sus parientes, por lo que figuraban fuera del universo del proceso.

Con esta entrega llegan a 35 las identificaciones del caso Patio 29 en la investigación iniciada por el Servicio Médico Legal en 2007.

El organismo forense continúa su trabajo pericial en la búsqueda de nuevas identidades.

Con este objetivo, entre diciembre y enero de 2011 se enviaron a laboratorios extranjeros 600 muestras de sangre de familiares de víctimas detenidas desaparecidas y ejecutados políticos sin entrega de restos, de un total de 2.300.

Esto contribuirá a completar el banco de perfiles de ADN de familias para posteriores comparaciones con material óseo.

Los peritajes estuvieron a cargo de los peritos Ad-hoc designados por el tribunal Rhonda Roby, especialista en genética forense y el Francisco Etcheverría especialista en medicina legal y forense.

De acuerdo a los antecedentes procesales quedan más de 90 pericias en las que aún no se han obtenido resultados definitivos de la identificación de restos exhumados desde el Patio 29.